Debido al accidente con uno de los aviones de LATAM, varias personas quedaron varadas en los interiores del aeropuerto Jorge Chavez.
Fotos: Lenin Tadeo /@photo.gec
Debido al accidente con uno de los aviones de LATAM, varias personas quedaron varadas en los interiores del aeropuerto Jorge Chavez. Fotos: Lenin Tadeo /@photo.gec

Lo ocurrido en el aeropuerto Jorge Chávez el día viernes, que acabó con la vida de dos bomberos aeronáuticos no puede quedar impune. Ya se reconoció que esta tragedia ocurrió durante el desarrollo de un ejercicio de emergencia, solo queda determinar quién aprobó esta práctica justo cuando un avión se disponía a despegar y, sobretodo, quién ordenó que la autobomba de los bomberos ingrese a la pista. Las investigaciones están en marcha, que estas no se dilaten más de la cuenta. Otro aspecto a analizar a raíz de esta tragedia es la respuesta del servicio aeronáutico ante esta emergencia, que obligó a cerrar el aeropuerto por más de 24 horas. No es posible que un país como el nuestro, con una gran afluencia turística, no cuente con un plan de contingencia en este tipo de situaciones. El aeropuerto de Pisco, que fue diseñado como un terminal alterno al de Lima, debería estar equipado para dar respuesta inmediata y recibir a los viajeros nacionales y extranjeros. Esta tragedia también ha puesto a la luz la falta de infraestructura aeronáutica en el país.