Gracias a la detección precoz del cáncer, en especial de mama, muchas mujeres superan este mal. Sin embargo, siguen siendo personas con riesgo de enfermedades crónicas como la diabetes, enfermedades cardiovasculares e, incluso, desarrollar un nuevo cáncer.

Se han realizado muchas investigaciones sobre la prevención desde la alimentación, pero son pocas las realizadas para evaluar la dieta y la sobrevida.

Un meta análisis que incluyó 84 estudios, con cerca de 90mil mujeres sobrevivientes del cáncer de mama, mostró algunas luces sobre cómo reducir los riesgos después del cáncer.

Mantener un peso saludable, practicar 30 minutos de ejercicio diario, reducir la grasa saturada y el consumo de jugos de fruta (en especial, envasados), limitar los almidones muy refinados, así como incrementar el consumo de verduras, alimentos ricos en fibra e incluir fruta fresca, reducirían los riesgos, al menos, de los 12 años subsiguientes al alta de la enfermedad.

Si lograste vencer el cáncer, no bajes la guardia. Elige bien lo que comes y mantén estilos de vida saludables.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: