Cuando estamos agotados nos frotamos los ojos, nos agarramos la cabeza, nos tocamos el estómago, nos presionamos nuestro cuello y hasta nos damos suaves golpecitos a nuestro cuerpo para despertarnos. A continuación, detallo algunos de los innumerables beneficios del automasaje.

1. Relajación muscular. El automasaje puede ayudar a liberar la tensión acumulada en los músculos, reduciendo la rigidez y el dolor. Al aplicar presión y movimientos suaves sobre las áreas afectadas, se promueve la relajación y se alivia la sensación de tensión muscular.

2. Mejora de la circulación sanguínea. Al realizar movimientos de automasaje, se estimula el flujo sanguíneo en la zona tratada. Esto puede ayudar a mejorar la circulación, oxigenar los tejidos y eliminar toxinas acumuladas.

3. Alivio del estrés y la ansiedad. Tiene efecto relajante sobre el sistema nervioso, lo que puede reducir los niveles de estrés y ansiedad. Al tomarte un tiempo para cuidar tu propio cuerpo y conectar con él, puedes experimentar una sensación de calma y bienestar.

4. Flexibilidad y movilidad mejoradas. Esta práctica también estimula la elasticidad de los tejidos y se mejora la movilidad articular. Puede ser especialmente beneficioso para personas que sufren de rigidez muscular o articulaciones tensas.

5. Alivio de molestias específicas. Como dolores de cabeza, dolor de espalda, tensión en el cuello y los hombros, entre otros. Al aplicar presión en puntos específicos en las áreas problemáticas se reduce la incomodidad y promueve una sensación de alivio.

El automasaje se puede realizar utilizando diferentes técnicas, como el uso de las manos, los nudillos, las palmas, los pulgares, o con herramientas como rodillos o bolas de masaje.

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