Dos proyectos de ley vienen siendo utilizados por los oportunistas de siempre para alterar la tranquilidad y la paz laboral en el país. El Perú requiere urgentemente de leyes como la de servicio civil y la universitaria. Ambas están orientadas a modernizar el estado y hacer más eficiente y competitiva a la educación en el país. No hay que dar marcha atrás porque de hacerlo, el gobierno estaría dándole gusto a unos cuantos que tienen temor de perder los privilegios con el cuento de que 'miles serán despedidos' o que se 'perderá la autonomía universitaria'.

Todos sabemos la tremenda burocracia que hay en Lima y provincias. Parece que todo estuviera preparado para enredar más los trámites y coimear. Aquí es donde entran a tallar los tramitadores de siempre. Los que tienen la solución a cambio de una 'aceitada'. Eso es lo que defienden quienes atizan a la huelga de los servidores públicos, algunos de los cuales se creen dueños del puesto. El estado tiene que modernizarse y ponerse a tono con el desarrollo. Hay que darle prioridad a la meritocracia, como lo sostiene el Premier Juan Jiménez Mayor. Dotar a las entidades públicas con equipos de última generación y modernizar la educación. Agilizar la justicia, equipar hospitales y garantizar la seguridad ciudadana para lo cual se requiere mejorar los cuadros policiales y mejorar el sistema de comunicaciones.

Para todo esto se necesita un estado eficiente y profesionales capaces. Por eso es que también urge una nueva ley universitaria. La educación superior, así como está actualmente, es una verdadera estafa. Algunas 'universidades' sólo se han formado para lucrar al pueblo y otras por intereses políticos o servir de plataformas para campañas electorales de quienes se mueren por llegar al poder. Los alumnos se gradúan sin saber leer ni escribir. No saben nada. Por eso es que se llenan de plata las tan cuestionadas academias preuniversitarias porque la educación secundaria no prepara a los jóvenes para que postulen en las mejores condiciones a la universidad sino que obligado tiene que pasar pos las 'academias'.

Hay 'universidades' que de eso solo tienen el nombre. Dan 'títulos' a profesionales incompetentes. Sin vocación ni actitud para trabajar en proyectos de desarrollo. Los institutos técnicos tampoco responden a las expectativas de los grandes inversionistas que se ven obligados a traer del extranjero a sus propios técnicos. Es que los nuestros no tienen la experiencia y la práctica de quienes manejan todo de acuerdo a la modernidad, como lo que hacen esas chicas peruanas que trabajan en la NASA y han venido a volcar sus experiencias y darnos lecciones de actitud, alta preparación y eficiencia. Ojalá aprendan los maestros y catedráticos del país, antes de andar pensando en huelgas ,bloquear carreteras o asignarse tremendos sueldos a costillas de las pensiones que cobran a cientos de jóvenes que ilusionados se matriculan para que les den un título que al final no vale nada porque nadie les da trabajo, ya que su preparación deja mucho que desear.