Mientras desde el gobierno de Venezuela se advirtió que sus Fuerzas Armadas están listas para responder al que se “atreva a agredir la integridad de la patria”, Estados Unidos continuó afinando su maquinaria de guerra para atacar territorio venezolano con el fin de derrocar a Nicolás Maduro.
Durante un juramento de comandos de comunidad bolivarianos, transmitida por VTV desde el estado Monagas (este), el secretario general del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, recordó que Maduro ordenó, hace meses, una “resistencia activa prolongada”, pero también la “ofensiva permanente” para defender Venezuela.
Fuerza de ataque
Todo sucedió cuando el portaaviones nuclear USS Gerald R. Ford (CVN-78), que zarpó de la isla de St. Thomas, ya se encuentra nuevamente navegando con su tripulación, misiles y cazas en aguas del mar Caribe, cerca a Venezuela.
Además, dos bombarderos B-52H Stratofortress de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, pertenecientes al 23° Escuadrón de Bombarderos de la Base Aérea Minot, realizaron otra misión simulada de ataque sobre el sur del Caribe.
A ambos bombarderos se les unieron cazas F-35C Lightning II del Cuerpo de Marines en su vuelo cerca de la costa de Venezuela.
Resistencia
En aeropuertos y bases militares venezolanas se puso en alerta a sus sistemas rusos de misiles antiaéreos Buk-M2E y S-300 ante la posibilidad de ataques estadounidenses.
Tropas en tierra también organizan a las defensas civiles por si se requiere enfrentar en tierra a los estadounidenses.
Estados Unidos emitió una advertencia a sus ciudadanos y residentes en Venezuela para que salgan ya del país.




