Tras abrir un forado desde un predio adyacente, delincuentes ingresaron a la bóveda acorazada del banco Sparkasse, en la ciudad de Gelsenkirchen, y se llevaron dinero, oro y joyas por un valor de 30 millones de euros.
Abrieron 3000 cajas de seguridad, el 95 % de las resguardadas con objetos de valor.
El golpe, planeado con precisión y se cree información interna, fue descrito como “altamente profesional” y comparado con el robo de la película “Ocean’s Eleven”.
Investigación
Según la Policía, investiga imágenes de videovigilancia del aparcamiento del edificio en las que se observa a varios sospechosos que viajaban en un vehículo modelo Audi RS6 con matrícula de Hannover, ciudad del norte germano.
Los ladrones entraron en la cámara acoraza a través de un gran agujero desde un edificio adyacente, cuando la filial del banco Sparkasse se encontraba cerrada con motivo de las fiestas navideñas.
El 95 por ciento de las cajas de seguridad para clientes fueran forzadas por los autores del robo, informó la entidad.
Clientes preocupados
“Debido a los grandes daños de construcción sufridos, los clientes no pueden entrar en esa parte hasta nuevo aviso”, indicó el banco, que ha puesto a disposición de los afectados una línea de teléfono especial.
La noticia del robo, que trascendió el lunes, provocó concentraciones de clientes preocupados por el destino de los objetos de valor que habían confiado a la entidad.
El diario Bild llegó a contar unas 200 personas en una de esas primeras concentraciones de clientes, escenas de tensión que volvieron a producirse este martes.




