Llegó el esperado mes de octubre; es decir, el periodo del año en el que se consume la mayor cantidad de turrón de Doña Pepa. De acuerdo con la tradición, este postre se hace presente en las mesas de las familias peruanas y es disfrutado por niños, jóvenes y adultos mayores.
Sin embargo, el coronavirus hizo que cada vez más nos preocupemos por nuestra salud y los alimentos que nos llevamos a la boca. Siguiendo esa línea, es necesario limitarnos en cantidades para que este delicioso aperitivo no resulte dañino para la salud de las personas.
Según la nutricionista Vannya Pineda, el turrón de Doña Pepa es un postre que aporta, principalmente, una cantidad considerable de calorías, azúcares y grasas. “Por los ingredientes utilizados en su elaboración, como la harina de trigo, el jarabe de frutas y la grasa vegetal, en 100 g de este producto, estaremos consumiendo 558 kcal aproximadamente. Esto equivale a comer tres panes untados con una cucharadita de mantequilla y otra de mermelada”, indicó la experta.
Lo recomendable es que se consuma el turrón en porciones de 50 gr. y que su frecuencia sea esporádica, en reemplazo de un postre. Además, la nutricionista hace hincapié en que se evite acompañarlo con bebidas azucaradas, como gaseosas o jugos envasados. “Debemos evitar ingerir más azúcar. El agua siempre será la mejor opción; también los refrescos en base a frutas y las infusiones sin azúcar”, enfatizó.
Cabe resaltar que las personas que padecen enfermedades como la diabetes, el sobrepeso y la obesidad, deberían consultar primero con su nutricionista la posibilidad de disfrutar de este postre. De acuerdo al estado nutricional del paciente, el profesional indicará las porciones a consumir.