Diversos artistas han logrado plasmar más de un engañoso detalle en sus obras de arte. Estos secretos han sido vinculados a temas políticos, económicos y religiosos, que marcarían un lado oculto del artista en cuestión.
A continuación, los códigos escondidos que muchos genios optaron por grabar en sus lienzos y, tras varias décadas, podrían ser finalmente revelados.
MONA LISA. Se conoce que Leonardo Da Vinci puso gran énfasis en finalizar la Mona Lisa a los últimos años de su vida. El pintor se considera una persona muy esotérica, por lo que no sorprende encontrar símbolos en sus cuadros. Es así que, en el ojo derecho del personaje se puede leer LV, probablemente como iniciales del artista; mientras que en el izquierdo, se puede observar, con un grado de dificultad, las letras CE o B, cuyo significado aún no se comprende.
LA ÚLTIMA CENA. Ante la serie de especulaciones que aparecieron en torno a los integrantes de la escena, la investigadora Slavisa Pesci creó un efecto visual donde colocó una capa semitransparente entre la imagen original y una versión espejo de la misma. Esto permitió que se aprecien las figuras de dos caballeros templarios al final del retablo, además de una persona que parece sostener a un pequeño niño al lado izquierdo de Jesús.
LA CAPILLA SIXTINA. Expertos señalan que la relación que existió entre Miguel Ángel y el Papa Julio II estuvo llena de episodios de ira y orgullo. Según relatan, esto se evidencia en la escena donde uno de los dos ángeles ubicados detrás del Papa, parece obscena. Aunque no se muestra evidente a simple vista, el pequeño se encontraría realizando un gesto conocido como "el higo", el cual agrede a la persona a la que va dirigido.
LOS PROVERBIOS FLAMENCOS. Este óleo, pintado por Pieter Bruegel, muestra alrededor de 112 proverbios, que se utilizan incluso en la actualidad. Algunas de las expresiones que saltan a la vista son "estar armado hasta los dientes", "echar margaritas a los cerdos", "las paredes oyen", entro otros.
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