Estas son las 7 cosas que jamás debería regalar a una mujer por San Valentín
A puertas de celebrar el Día de los Enamorados, le brindamos una lista de obsequios que nunca debe regalar a su pareja durante esta celebración tan especial. Tome nota porque aún está a tiempo de no arruinar uno de los días más románticos del año.
Lo mismo que el año pasado
Lo mismo que el año pasado
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¿Ya le ha regalado con anterioridad joyas o chocolates en forma de corazón? Si es así, no repita el mismo plato y sea más creativo. Un regalo repetido solo demuestra falta de esfuerzo e iniciativa para hacer feliz a la pareja.
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Su pareja pensará que le está lanzando una indirecta sobre el aspecto de su cuerpo. Aunque su intención sea buena, es preferible evitar obsequios como balanzas, mancuernas, una máquina para hacer ejercicio, pastillas para bajar de peso, etc.
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¡Ni se le ocurra comprar algo para la casa! Si realmente quiere sorprenderla, entregue algo que sea exclusivamente para ella y que la haga feliz. Jamás vaya por herramientas para el hogar como planchas, sartenes o licuadoras, a menos que quiera que se lo lance por la cabeza.
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Los libros siempre son una buena opción, pero los de superación personal pueden llegar a ser un regalo bastante incómodo. Nadie quiere recibir un manual sobre cómo manejar sus problemas, a menos que lo compre por iniciativa propia.
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Hay dos reacciones ante este tipo de regalo: que su pareja lo tome como una demostración de amor o, por el contrario, que piense que usted es demasiado intenso para la relación. Además, si no está 100% sobre el futuro de su romance, puede que se arrepienta luego.
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Puede parecer un obsequio adorable a primera vista, pero un animal no es un juguete que uno pueda entregar y desechar así de fácil. Ya sea perro, gato o hámster, una mascota requiere de mucha responsabilidad y su adopción debe ser consensuada antes.
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A ninguna mujer le gustaría recibir este obsequio, ni aunque sea el whisky más caro de la tienda. Dar alcohol como regalo resulta muy impersonal y poco acertado. Mejor entregue una botella de vino o champagne como acompañamiento de una velada romántica, pero nunca como el obsequio principal.