Cuanto peor dormimos, más nos cuesta levantarnos de la cama, sobre todo en los meses de invierno. Suena la alarma más de una vez y tú sigues acurrucado bajo las colchas. Nos pasa a todos, pero hay que saber darle vuelta a este mal hábito, y conseguir que levantarse no sea una experiencia tan traumática.
Hay ciertos trucos caseros que nos pueden ayudar a mitigar el drama y hacernos levantar en tan solo un minuto. No tendrás que presionar el botón de apagar la alarma. Los consejos han sido revelados por Coveteur y la National Sleep Foundation, y recogidos por el diario británico Daily Mail.
1. Beber agua
Antes de irte a dormir, es recomendable dejar un vaso o tomatodo con agua en la mesa de noche. Cuando te levantes, toma un trago para ayudar al cuerpo a hidratarse y a impulsar el metabolismo al iniciar la jornada. También te vendrá bien para despertarte y te hará sentir mucho más fresco.
2. Abrir las cortinas
Ver la luz entrar a través de las ventanas por la mañana puede ser algo tedioso, pero es una manera muy sencilla de que te des cuenta de que es hora de despertarse. Por ello, antes de irse a la cama, abre las cortinas para que cuando te levantes por la mañana, el amanecer entre por tus ventanas.
3. Usar la cama solo para dormir
¿Por qué a veces nos sentimos cansados todo el día, y luego, cuando es hora de ir a la cama, no podemos conciliar el sueño? Si empiezas a estar todo el día en la cama para hacer otras cosas que no son dormir, tu cerebro dejará de relacionarla con el descanso, haciendo que te cueste conciliar el sueño.
4. Despertadores portátiles
No hay nada más horrible que el sonido de una alarma de celular. El ruido puede arrancarte literalmente de tu sueño de una manera muy estridente, lo que significa que tu primera experiencia en el día será de ‘shock’ positivo y subidón de adrenalina, en lugar de sentir que estás descansado.
Mejor usa despertadores portátiles. Es la elección ideal para las personas que luchan para hacer frente al ruido abrasivo de su smartphone.
5. Adiós alcohol y cafeína
Tras una larga rutina de trabajo, suele apetecer relajarse con una taza de café o tal vez una cerveza. Sin embargo, si quieres levantarte temprano sintiéndote descansado, tendrás que dejar de lado la cafeína y el alcohol. En su lugar, anímate a tomar infusiones calientes sin cafeína, como la manzanilla.
6. Convencerte de madrugar
Si frecuentemente te quejas de que no eres madrugador, nunca podrás levantarte sin hacer drama. En vez de renegar, háblate de manera positiva todas las mañanas. Tienes que comenzar a pensar en los aspectos más positivos que te esperan en la jornada, ya sea una reunión, un almuerzo o ir al cine.
7. Apagar las pantallas
Aunque pueda parecerte imposible conciliar el sueño sin ver la televisión o estar en las redes sociales, debes saber que estás equivocado. Son estos dispositivos los que hacen que duermas mal y que, por tanto, te cueste levantarte por la mañana. Apagar todos los dispositivos electrónicos, como el televisor, las laptops y el móvil, puede marcar drásticamente la diferencia en tus hábitos de sueño.
Mejor intenta leer un libro, escribir en un diario o incluso colorear mandalas. Todas estas actividades sin pantalla te ayudarán a calmar tus ojos y tu mente, y te prepararán para dormir tranquilamente.