Los corazones frágiles

Las consecuencias de un infarto son más graves en ellas y tienen más probabilidades de repetirse.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las enfermedades cardíacas y los accidentes cardiovasculares son la principal causa de muerte en América. Los países de medianos y bajos ingresos son los que registran el mayor porcentaje de fallecidos.
Antes se creía que los hombres sufrían con más frecuencia de estos problemas; sin embargo, las estadísticas señalan que ahora son más las mujeres diagnosticadas con estas molestias. Asimismo, los cardiólogos afirman que los ataques al corazón son más graves en ellas que en los varones.
Según el Instituto del Corazón de Texas, en los primeros seis años después de haber sufrido un ataque cardíaco, las mujeres tienen una probabilidad casi dos veces mayor que los hombres de sufrir un segundo ataque.
Debido a que la enfermedad cardiovascular avanza en forma silenciosa, la única forma de perevenirla es evitando los factores de riesgo.
Por ello, tanto hombres como mujeres deben evitar fumar y consumir bebidas alcohólicas, controlar sus niveles de colesterol e hipertensión arterial, realizar actividad física y cuidar su peso. Las diabéticas, en especial, deben ir a control porque corren más riesgo de padecer un problema cardiaco, ya que esta enfermedad anula los efectos protectores del estrógeno.