GRECIA LLANOS

Aunque se trata de un procedimiento ancestral, , implementada en los hospitales. No obstante, en el Instituto Nacional Materno Perinatal (ExMaternidad de Lima), las madres están retomando esta práctica tradicional.

Según el galeno Jhon Silva, jefe del Servicio de Centro Obstétrico, en 2018, el 60% de los 11 mil partos realizados en dicha institución fueron verticales. En lo que va del año, el porcentaje es el mismo: de 5300 nacimientos atendidos, más de la mitd fue con este procedimiento.

Al cambiarse la posición de vertical a horizontal, si bien es cierto ayudaba a que haya apoyo para el nacimiento del bebé, se sacrificaba un importante fuerza que es la de gravedad, necesaria para el proceso de parto y la cual sí está en la posición semisentada”, explicó.

En ese sentido, detalló que el Instituto Nacional Materno Perinatal retomó, en 2001, el procedimiento del parto vertical para apoyar a las mamás y se sintieran cómodas. “En la posición horizontal es un poco más complicado el pujo, inclusive hasta se anula”, refirió.

El parto vertical se desarrolla en una cama prototipo, que permite cambiar la posición a semisentada. “Esta cama da opción a que si la mamá quisiera puede dar a luz en cuclillas o como ella desea”, señaló el doctor.

En el Hospital Rebagliati, de EsSalud, el parto vertical está siendo elegido por más mujeres, debido a que esta posición permite a la madre dar a luz con mayor comodidad y menos dolor, disminuyendo los riesgos de mortalidad materno infantil.

El doctor Jorge Calderón Cornejo, coordinador del Centro Obstétrico - Sala de Partos del referido nosocomio, explicó que esta forma de alumbramiento, además de ser rápido, “ayuda al bebé a orientarse al canal del parto, potencia su oxigenación y reduce los traumatismos en el recién nacido y la madre”.