¿Terror a engordar en el embarazo? Ojo con la pregorexia

Llega el embarazo y hay detalles que preocupan a toda mujer: el peso. Engordar. Un miedo que, según el Índice de Masa Corporal (IMF), no debería preocupar a esa futura mamá si esos kilos bordean entre los 11 a 16 kilos. Pero, ¿si se preocupa demás hasta rajar en la obsesión? Ese problema, conocido como pregorexia, puede convertirse en un peligro mortal.

Pese a que aún no figura en el Manual de Trastornos Mentales, libro pilar de la Asociación Estadounidense de Psiquiatría, como es el caso de la anorexia y la bulimia, más de un experto en salud considera que la pregorexia sí está presente en las gestantes.

¿Cómo reconocerlo?

La embarazada se preocupa por las calorías hasta el punto de buscar una excusa para comer solas o saltarse las comidas, se ejercitan demasiado y se provocan el vómito. De acuerdo a investigaciones en Reino Unido, 7,6 por ciento de las mujeres gestantes que participaron sufría de síntomas parecidos a trastornos de los aspectos alimentarios.

Especial atención

Lo anteriormente mencionado puede ser difícil de detectar, por eso, se aconseja a familiares y personas del entorno que estén vigilando a las mujeres que hayan padecido trastornos de la conducta alimentaria, como anorexia y bulimia.

Si es testigo de cualquiera esos señales, la paciente necesita acudir urgentemente al médico porque las consecuencias de una drástica de alimentos puede ocasionar terribles secuelas en el futuro bebé y en la afectada. 

Mientras que la progenitora puede ser víctima de la anemia, descalcificación ósea, baja producción de leche durante el postparto y caída de cabello, en el feto puede aumentar el riesgo de alteraciones del tubo neural como la espina bífida, retraso en el crecimiento, malformaciones o riesgo de parto prematuro. 

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