La educación para adultos, requiere un esfuerzo mayor que implica destinar un tiempo adicional a las actividades diarias para estudiar, y sobre todo enfrentar factores como la inseguridad o miedo de no cumplir con las metas propuestas. Frente a este escenario y con el objetivo de sensibilizar a la población peruana sobre la educación de los adultos, cada segunda semana de septiembre en el Perú se celebra la “Semana Internacional de los Estudiantes Adultos”, bajo Resolución Ministerial N° 418 - 2001 -ED.
“Para los adultos, a diferencia de los niños, la motivación de estudiar radica en los resultados y los beneficios que les aportará el esfuerzo que realizarán, tanto a nivel personal como familiar; pues en muchos casos, deciden retomar o iniciar sus estudios para poder ser un ejemplo de superación u ofrecerles una mejor calidad de vida a su familia”, explica César Dávila, promotor del CEBA César Vallejo.
En esa línea, la educación básica alternativa está diseñada para brindar educación básica a personas adultas que no tuvieron la oportunidad de completar su educación primaria y secundaria en su momento, brindando herramientas necesarias para mejorar su calidad de vida, su capacidad laboral y su participación en la sociedad.
Precisamente, en el marco de la “Semana Internacional de los Estudiantes Adultos”, César Dávila explica algunos mecanismos que ayudarán a motivar a los adultos a seguir estudiando, frente a un contexto donde parece que es más difícil aprender a medida que pasan los años:
- Fijar objetivos a corto plazo: Se recomienda ir paso a paso y establecer metas cortas, para que el proceso de formación no se convierta en una tarea abrumadora e inalcanzable. Frente a las responsabilidades que se tiene, es fundamental aprender a tolerar la frustración, y no dejar de intentar para lograr las metas que se hayan propuesto a corto plazo.
- Implementar una enseñanza práctica y activa: Más allá de la teoría, el aprendizaje con adultos se vuelve más efectivo cuando es un proceso activo y práctico. La conexión de los temas con su vida y lo relevante que estos puedan llegar a ser para ellos, hará que se vuelvan atractivos y más sencillos de aprender y retener.
- Tener motivaciones personales: Tener un incentivo final, ya sea personal o familiar, es el mejor estímulo para estudiar. La satisfacción de haber cumplido una meta y demostrar sus capacidades, y poder superar las adversidades o responsabilidades es la mejor satisfacción, para seguir creciendo.
- Elimina los prejuicios: Confía en ti y tus habilidades, es importante neutralizar los miedo o prejuicios que puedan surgir, como la edad, para buscar soluciones a estas posibles barreras que se presentar mientras estudias. Se debe recordar cuáles son los aspectos positivos que obtendrás con la formación y seguir adelante.