La explanada del complejo Qhapac Ñan, en el corazón de Cajamarca, se vio ayer colmado de miles de turistas nacionales y extranjeros que celebraron con pintura, agua y talco el tradicional ingreso del “Ño Carnavalón”, acto que marca el inicio de una de las festividades más importantes de la región.
A lo largo del jirón Independencia, los visitantes confundidos con pobladores locales fueron recibidos con globos de agua arrojados desde techos de las viviendas, al ritmo del interminable compás de las orquestas.
Entre el 9 y 14 de febrero, Cajamarca se convierte en la “Capital del carnaval peruano”. Ayer, la alegría se desbordó tras la llegada del “Ño Carnavalón”, un muñeco alto, de barba y grandes orejas, y ataviado de un electrizante terno azul.
Para hoy se tiene programado el concurso de patrullas danzantes y comparsas que se organizan en barrios cajamarquinos exhibiendo sus mejores trajes durante su recorrido.
Mañana se espera la salida del Gran Corso del Carnaval, en que desfilarán las reinas de belleza en diferentes carros alegóricos por las principales calles de la ciudad.
Para la edición 2024, Camila Marín Aro, de 20 años, representante de la provincia cajamarquina de San Marcos, resultó elegida “Reina Integración del Carnaval”.
entierro. La tradición manda que el festivo y simbólico velorio del “Ño Carnavalón” (martes 13) se debe realizar en el mirador Santa Apolonia, un cerro ubicado a dos cuadras y media de la Plaza de Armas de Cajamarca.
Un día después, el entierro del “Ño Carnavalón” se llevará a cabo en el distrito de Baños del Inca.
El domingo 18 se realizará el concurso y baile de clones, personajes de vestimenta colorida y de danza festiva.