Un  de tan solo dos años casi pierde el ojo luego de que el  con el que jugara explotara. El hecho ocurrió en .

El menor de edad resultó afectado en el ojo derecho y con pequeñas quemaduras en diferentes partes del cuerpo.

La madre del menor relató que se prendió en fuego la batería y fueron las esquirlas las que impactaron, afectándole el rostro.

Agregó que el celular era de última generación y relativamente nuevo, por lo que no logra entender por qué sucedió este incidente.

Tras lo sucedido, el niño fue llevado al hospital de la zona, pero luego trasladado a otro centro de salud.

Afortunadamente, el ojo del niño se logró salvar.

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