Una arteria bloqueada, filtración o ruptura de un vaso sanguíneo son las causas más frecuentes de un, también conocido como ictus, una emergencia médica que puede dejar secuelas permanentes o temporales como las que limitan el dominio de la masticación.

Un bloqueo en la arteria suele ser por una arterioesclerosis (acumulación de grasa en sangre). Lo primero en el cuidado de la dieta es incrementar el consumo de fibra a través de verduras, menestras y fruta con cáscara y, por otro lado, reducir la grasa de origen animal.

Los pacientes con secuelas por ACV tienen riesgo de aspiración por alimentos como el arroz, quinua, trigo graneado, así como los líquidos muy fluidos como el agua y refrescos. Es más conveniente optar por las texturas pastosas y densas como la menestra colada bien cocida y purés. En cuanto a los líquidos resultan mejor los densos como los jugos o emoliente.

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