El kale es una hortaliza nativa de la zona del Mediterráneo. Pertenece a la familia Brassicaceae al igual que la mostaza, rábanos, repollo, entre otras. El kale también se le conoce como berza, col rizada o repollo rizado y, a diferencia de la col, no forma cabeza y sus hojas son alargadas, rizadas u onduladas, de color verde-azul oscuro o púrpura y puede alcanzar los 30cm a 40cm.
La hoja se puede consumir fresca, guisada e, incluso, procesada. Es considerada una de las hortalizas con mayor beneficio por su aporte nutricional y sus fitoquímicos. Entre sus vitaminas destacan la vitamina C, K y A, y también posee minerales como el hierro y el calcio. 100g de kale tiene tanto calcio como 200ml de leche y aporta 50kcal y 2g de fibra.
Concentra antioxidantes de tipo flavonoides y carotenos con capacidad antiinflamatoria muy convenientes en enfermedades de tipo autoinmune o que cursan con dolor como la fibromialgia. Además, contiene carotenos de tipo luteína y zeaxantina muy buenos para prevenir la degeneración ocular.
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