¡Habla sobrino! Mis patas economistas andan alertando de que, si bien no cerraremos este año en rojo, la inversión privada viene lenteja y que esto lleva ya tiempo. Si entre 2004 y 2008 la inversión crecía 17%, esto ha ido desplomándose, pasando a una caída de 1 % en promedio entre 2014 y 2018, y un crecimiento de solo 3 % entre 2019 y 2023.

Esto nos alarma porque la chamba se mueve junto con el crecimiento de la economía y la inversión. De hecho, Phase Consultores calculó que por cada punto que crece la inversión privada, se generan más 12,500 empleos. Y no es solo que los vientos sean peores: la inestabilidad política y el vaivén de decisiones hace bien difícil que alguien quiera arriesgar su platita en el Perú. Más si tienes un alcalde que se niega a cumplir fallos, un Ejecutivo que no le pone pare a las locuras del Congreso y que ni tiene una postura clara frente a una empresa que viene perdiendo plata como cancha, por dar ejemplos. ¡Tienen que ordenarse, causas!

TE PUEDE INTERESAR: