Masaru Emoto fue un científico y escritor japonés conocido por sus estudios en el campo de la “fotografía de cristales de agua” y su teoría sobre cómo las palabras y emociones pueden afectar la estructura molecular de este líquido.
Emoto afirmaba que cuando el agua se exponía a palabras y emociones positivas, como “amor”, “gratitud” y “paz” se formaban hermosos cristales hexagonales y simétricos. Por otro lado, cuando el agua estaba expuesta a palabras y emociones negativas, como “odio”, “miedo” o “violencia” se formaban cristales distorsionados y desordenados.
Presentó sus hallazgos en su libro “Los Mensajes del Agua”, que se publicó en 1999 y se convirtió en un éxito de ventas en todo el mundo. El libro incluía fotografías de los cristales de agua y afirmaciones sobre el poder de la intención y la influencia de las emociones humanas en la estructura del agua.
Su investigación sugiere que las palabras y las vibraciones emocionales pueden afectar las moléculas de agua. Esto a su vez podría tener un impacto en nuestra salud y bienestar, ya que el agua es un componente esencial de nuestro cuerpo.
El mensaje detrás de los estudios de Emoto es una llamada a la reflexión sobre cómo nuestras palabras, pensamientos y emociones pueden afectar no solo a nosotros mismos, sino también al mundo que nos rodea. Su mensaje destaca la importancia de mantener una actitud positiva expresando amor y gratitud hacia nosotros mismos y hacia los demás.
La teoría de los cristales de agua de Masaru Emoto ha capturado la atención de innumerables personas y ha inspirado a muchos a considerar cómo comunicar nuestros sentimientos influye en nuestras vidas y nuestro entorno.
Las palabras tienen un poderoso impacto en nuestro estado de ánimo. Ser amables y positivos en nuestra expresión nos ayudará a construir una mentalidad y un mundo más sanos.