Que los escándalos de la farándula y el tema futbolístico no nublen nuestra capacidad de ver que hoy en día existe un problema mayor al interior del país, que viene afectando a decenas de agricultores, se trata de los incendios forestales. Desde enero y hasta la fecha, el fuego desatado, muchas veces por la actividad humana, ha arrasado con más de 3 mil hectáreas de sembríos en la selva y la sierra. La región más dañada es Cajamarca, con más de 1600 hectáreas de plantaciones forestales, zonas agrícolas y pastos naturales destruidos. Estos siniestros también han cobrado vidas, como lo ocurrido en Ayabaca, Piura, donde padre e hijo murieron tratando de apagar las llamas de un incendio. Ante esto, las autoridades locales no cuentan con la logística necesaria. Urge que el gobierno central gire la mirada hacia estas comunidades para llevarles el apoyo necesario, como unidades aéreas. Que la ayuda llegue rápidamente, cada minuto que se pierde genera grandes pérdidas económicas.