El presidente Nicolás Maduro y su grupo de poder.
El presidente Nicolás Maduro y su grupo de poder.

Aunque se restableció ayer el fluido eléctrico en gran parte del país, el presidente de , Nicolás Maduro, advirtió que ese “sabotaje” de la oposición, que denuncia un electoral, es un crimen por el que los “culpables” deberán responder, en claro anuncio de más apresamientos por las fuerzas del orden.

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Eso se tiene como un anticipo de una ola represiva en Venezuela, en crisis tras las elecciones del 28 de julio en que para la oposición se consumó un fraude. Maduro culpó a un complot en el que, una vez más, metió a .

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Esto se da en Venezuela cuando el régimen chavista entregó a Rusia a los colombianos José Medina y Alexander Ante, quienes hicieron escala en Caracas y ambos son acusados de pelear para Ucrania contra los rusos.

¿Fascismo?

Con breves cortes y restablecimientos sucesivos, al cierre de esta edición aún existían problemas en hospitales y grifos de expendio de combustibles que registraban largas colas de vehículos para abastecerse tras el apagón en el 90 % del país.

Maduro acusó al “fascismo”, a “terroristas de derecha” (como llama a los opositores) y a hackers de Anonymous, que “trabaja con la CIA”, de estar detrás del apagón.

¿Detenciones?

Acusar a la oposición del apagón es preludio de detenciones, incluso la del candidato presidencial antichavista, Edmundo González, que trascendió se ordenará en cualquier momento.

El diario La Nación (Argentina) detalló que el “múltiple y complejo” aparato represivo de Venezuela lo integran la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, de la que depende la Guardia Nacional Bolivariana, activa en la represión de protestas.

También incluye a la Policía Nacional Bolivariana y dos servicios de inteligencia bajo el mando de Maduro.


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