Astracán es una importante ciudad del sur de Rusia que se convirtió en escenario de una insólita escena: la localidad ‘desapareció' en cuestión de minutos, debido a una gran tormenta de arena que obligó a los ciudadanos a protegerse en sus casas.
El Ministerio de Situaciones de Emergencia regional advirtió que las ráfagas de viento pueden alcanzar velocidades de entre 15 y 20 metros por segundo, señala el medio RT.
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Debido a lo anterior, pidió a las personas que eviten salir a la calle, al menos mientras la tormenta pase por la ciudad.
Los residentes no dudaron en registrar el fenómeno y difundir el material a través de las redes sociales, donde es posible observar la voracidad del fenómeno. Algunas personas señalaron que es la primera vez que ocurre algo de tal magnitud.
Se sabe que este tipo de tormentas, que son comunes en países asiáticos, suelen venir del desierto de Gobi, situado entre China y Mongolia.
Para hacerles frente, las autoridades han reforestado desde hace varias décadas las zonas periféricas de los desiertos, con el fin de crear una “gran muralla verde” que tiene como objetivo bloquear la arena.