La rubia platinada más famosa de Hollywood se aseguraba siempre de usar protector solar para mantener el tono natural de su rostro. Además, jamás hacía uso de los polvos bronceadores para contornear la forma de su cara. En su lugar, utilizaba un poco de vaselina en los pómulos para otorgarle ese brillo especial.
¡Adiós al bronceado!