Alumnos y profesores del Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias (CUCBA) de la Universidad de Guadalajara de México hallaron que la picadura de abeja es un método de tratamiento efectivo para los pacientes que padecen del mal de Parkinson.
El veneno del mencionado insecto contiene apitoxina y estudiaron a los ratones quienes recobraron la capacidad de manipular y reconocer objetos. Se observó que recuperan un 70% de la memoria a corto plazo.
Silvia Josefina López Pérez, investigadora del Departamento de Biología Celular y Molecular del CUCBA y principal responsable del estudio afirma que las personas que padecen Parkinson pierden las neuronas dopaminérgicas.
Además, la especialista informa que incidencia del mal en adultos mayores es del 30%, pero la cifra está creciendo en personas jóvenes.
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