El magistrado Aldo Vásquez que fue inhabilitado de la Junta Nacional de Justicia (JNJ) por decisión del Tribunal Constitucional (TC), consideró al fallo como “insólito y absolutamente inédito”, usando “argumentos totalmente deleznables” para darle la razón a un sector del Congreso que buscaba apartarlo de ese organismo.
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Como se sabe, en la víspera el Tribunal Constitucional resolvió restablecer la inhabilitación de los magistrados Aldo Vásquez e Inés Tello de sus cargos en la JNJ, la cual fue dispuesta por el Congreso, el pasado 7 de marzo. La sanción del Parlamento había quedado suspendida por la Primera Sala Constitucional de la Corte Superior de Justicia de Lima, hasta que se emita una resolución definitiva.
Ahora, el TC dispuso declarar fundada en parte la solicitud de medida cautelar formulada por el Congreso, y suspendió el fallo del Poder Judicial.
Aldo Vásquez considera “injustificada” y que no tiene precedente en la historia, pues “no se puede encontrar una medida cautelar contra otra medida cautelar”.
Asimismo refirió que en dicho proceso no han tenido el derecho a la defensa. “No hemos sido notificados, nosotros no somos parte en este proceso. Se toman decisiones que atañen a nuestros derechos fundamentales sin que tengamos siquiera oportunidad de ser parte en el proceso”, indicó en Canal N.
Sostuvo que con la medida del Tribunal Constitucional “se nos ha desprotegido de manera injustificada”, usando “argumentos totalmente deleznables”. “Se usan argumentos en la resolución del TC, y lo digo con el mayor respeto institucional, pero que resultan totalmente deleznables. Señalar que uno de los magistrados de la sala que concedió la medida cautelar a nuestro favor debe pasar por un proceso de ratificación, eso es evidente. Todos los magistrados del país deben pasar por proceso de ratificación y esa no es causal ni de inhibición ni de recusación de un magistrado”, señaló.
Aldo Vásquez refirió que el fallo del TC convierte en irreversible el daño a la institucionalidad del país. “El daño que se causa con esta decisión es enorme, no solamente a la persona, sin embargo el daño a la institución corre el riesgo de ser irreversible”, dijo.