Hacer ejercicio físico tiene ventajas que pueden variar según la hora del día. Ejercitar por la tarde aumenta el rendimiento físico, ya que la temperatura corporal y la capacidad muscular están en su punto más alto, lo que puede reducir el riesgo de lesiones.
Estudios sugieren que el rendimiento cardiovascular, la fuerza y la resistencia muscular suelen ser mejores en la tarde, entre las 14:00 y las 17:00. Además, la coordinación y el tiempo de reacción son más precisos, lo cual es útil para ejercicios que requieren habilidades específicas.
Ejercitar por la noche puede ayudar a liberar el estrés acumulado durante el día. La fuerza y la resistencia también son relativamente buenas. Por otro lado, el ejercicio nocturno no afecta negativamente el sueño en la mayoría de las personas, y en algunos casos, puede incluso promover el descanso, aunque en otros puede dificultarlo.
TE PUEDE INTERESAR:
Comer para vivir: Chía y linaza, formas de consumir estos superalimentos
Comer para vivir: Cómo controlar el picoteo entre comidas
Comer para vivir: ¿Los lácteos empeoran la digestión?