Es uno de los frutos secos más apreciados por su sabor y beneficios. No es muy accesible por su alto precio, pero lo bueno es que se necesitan tan solo 30 g (aproximadamente, 49 unidades) para obtener los beneficios. Esta cantidad cubre el 11% de las necesidades de proteína y el 10% de la fibra que necesitamos ubicándose entre los 2 frutos secos más ricos en fibra.
Más de 52% del fruto está constituido por grasas saludables que evitan placas de ateroma en las arterias. Además, es libre de colesterol y está demostrado que el consumo diario de nueces como el pistacho protege la salud cardiovascular. Por otro lado, sus constituyentes favorecen la aparición de saciedad convirtiéndolo en un buen alimento para la media mañana o tarde, en especial si suele “picotear”.
Es un excelente snack y puede consumirse desde la alimentación complementaria en forma de mantequilla y desde los 3 años entero (para evitar atoros).
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