Esta es una pregunta frecuente entre mis pacientes, sobre todo aquellos que tienen origen andino ya que suelen despertar muy temprano y realizar actividades que demandan mayor gasto físico. Personas con este perfil pueden tener necesidades distintas de calorías en la medida que la rutina física se mantenga.

Pero si la misma persona deja esa actividad reduce su nivel de actividad, el arroz no es la mejor opción para el desayuno y menos si es en una cantidad generosa.

Para quienes no tienen mayor gasto físico en la mañana, es mejor un cereal o grano entero integral y alto en fibra, en cantidad controlada. La avena, la quinua, el camote, el choclo o el pan de granos enteros son mejores opciones. La cantidad depende de la necesidad y características de la persona, entre ellos, la edad, actividad física y su estado de salud.

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