La dictadura comunista que gobierna Cuba elevó en más de ocho veces los precios de los combustibles desde el viernes 1 de marzo causando mayor preocupación en la población.
El precio de la gasolina aumentó de 25 pesos cubanos (0.20 centavos de dólar) a 132 pesos cubanos (1.10 dólares), lo que equivale a un aumento de 428 %. Y la gasolina especial subió de 30 (0.25 centavos de dólar) a 156 pesos cubanos (1.30 dólares), lo que representa un alza de 420 %.
Y así el combustible en Cuba sigue siendo uno de los más baratos del mundo porque el Estado la subvenciona, es decir paga gran parte del costo. Si hacemos comparación, medio litro de agua embotellada en Cuba se vende entre 100 y 200 pesos, es decir al mismo precio que un galón de gasolina.
No es chiste
“Me voy a comprar una bicicleta que la gasolina está muy cara, unos patines o unas carretas con caballo”, ironizó Giovanni García, un mensajero de 27 años, que esperaba cargar el tanque de su automóvil de la década de 1950, en una estación de combustible en el oeste de La Habana.
El ministro de Energía y Minas, Vicente de la O Levy, explicó que “el objetivo es lograr el reabastecimiento de los combustibles y provocar el ahorro en los que consumen más”.
El alza al precio de combustible ha generado preocupación entre la población que teme una escalada de precios, en medio de la inflación que afecta al país desde 2021. Los precios subieron 30% en 2023 y 39% en 2022.
“La compra de combustible hay que dejarla para primeras necesidades, todo lo que sea hospitales y alimentos”, dijo Juan Alberto Machín, de 44 años y asistente de producción.
Fuente: 20minutos.es
