Magaly Moro

Fabiola (39 años, Centro de Lima). Doctora Magaly, me siento demasiado triste, espero que al contarle mi historia, usted pueda darme un consejo para salir de este hoyo. 

Estoy en una relación sentimental con Raúl desde hace 11 meses. Lo vi en mi centro laboral, nos gustamos y decidimos iniciar un romance. No hubo tiempo para conocernos porque mis amigas me decían que si no me quedaba con él, sería bien difícil encontrar a alguien más. “No eres una chibola tampoco, acepta ser su enamorada y, de aquí a unos meses, buscas el matrimonio para que no se te vaya el tren”, me comentaban en los almuerzos.

Así fue, doctora, nos hicimos novios. Con el pasar de las semanas, me di cuenta de algunas actitudes que no me gustaban. Una de ellas es que es muy criticón y burlón. Si a alguien le pasa algo malo en la oficina, él es el primero en reírse y empieza a hacer bromas desatinadas. Le he dicho que trate de mejorar en ese aspecto, pero toma a mal mi consejo y piensa que lo quiero cambiar.   

Lo peor de todo es que hace 2 meses cometí el error de contarle que a los 17 años, un perro me arrancó un poco de piel de la pierna y me dejó una gran cicatriz. Pensé que se quedaría callado, sin embargo, en el trabajo empezó a contárselo a todos en un tono burlesco, pero eso no fue todo, también comenzó a ponerme ‘chapas’ que generaban las risas de todos. Eso ha creado inseguridad en mí y ya no quiero ir con faldas o vestidos. Me da mucha vergüenza. Ay, doctorcita, ¿Qué hago con este hombre? Soy sincera, no quiero quedarme sola.

Ojo al consejo

Querida Fabiola, no debes estar con alguien solo porque “se te va el tren”, las cosas no funcionan así. No hay una edad determinada para enamorarse, ese es un prejuicio tonto. Por otro lado, no hay mucho que pensar sobre tu relación, ¿realmente quieres seguir con alguien que te humilla en público? No lo creo. Todas queremos a un compañero que nos ame tal y como somos, no a un enemigo. Suerte.