A causa de la pandemia por , el trabajo, estudio y transacciones comerciales han tenido que adaptarse al espacio digital obligatoriamente, siendo uno de los cambios más significativos para el día a día de las personas. Luego de casi un año de su implementación, se ha desarrollado un preocupante cansancio hacia estas modalidades virtuales, la cual puede resultar peligrosa si no se trata a tiempo.

El tecnoestrés se refiere específicamente al estrés asociado hacia las nuevas tecnologías en las actividades diarias del ser humano, como el , las , las reuniones y celebraciones a distancia. Esto afecta, en su gran mayoría, a los jóvenes adultos y a las personas de la tercera edad que recién se están adaptando a la tecnología.

Síntomas del tecnoestrés

  • Pérdida de autoconfianza
  • Falta de motivación en el trabajo
  • Bajo rendimiento laboral
  • Problemas de memoria y concentración
  • Ansiedad
  • Irritabilidad
  • Falta de sueño
  • Depresión
  • Fuertes dolores de cabeza

¿Cuáles son las causas?

Según Tania Guimac, psicóloga organizacional y profesora de la Universidad de Piura, el dolor de cabeza o cefalea constante podría ser causado por la excesiva exposición a las pantallas, ya que la vista se cansa, los músculos del cuello, espalda y brazos se tensan, y los dispositivos tecnológicos obligan a mantener una postura permanentemente contraída.

Además de ello, las extenuantes horas de teletrabajo y clases virtuales generan fatiga a la larga y la sensación de estar realizando lo mismo todos los días. Así pues, tanto los trabajadores como los estudiantes presentan la sensación constante de estar “estancados”.

Por otro lado, las personas que aún no están acostumbradas al uso de las nuevas tecnologías suelen centrar más su atención a aprender cómo manejarlas, olvidando otras necesidades básicas como comer a la hora, dormir lo suficiente o hablar con sus seres queridos.

Tips para prevenir el tecnoestrés

Limite el uso de redes sociales: Oculte las notificaciones de likes, comentarios o los DM cuando su atención debe estar centrada en el trabajo, estudio, tareas domésticas, etc.

Evite usar el celular u otro dispositivo antes de dormir y al levantarse: En su lugar, realice otras acciones que lo ayuden a ganar tiempo como tender su cama, tomar desayuno o meditar.

Vaya a la mesa sin celular, durante las comidas: Esta es una buena práctica si se vive para compartir los momentos con la familia.

Desintoxíquese de la tecnología: Desconéctese por algunos periodos de tiempo, siempre y cuando no afecte sus responsabilidades de trabajo o estudio, sobre todo en algunos fines de semana o cuando se está de vacaciones.

Pase tiempo con las personas que comparte la vivienda: La relación con los demás enriquece las vidas, al compartir, al dar o recibir consejos o al enseñar o aprender, etc.

Practique la atención plena o mindfulness: Es importante poner atención completa a las tareas que realiza. Evite ser multitasking en actividades que no lo requieran como cocinar o leer.

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