El ojo, al igual que todas las estructuras que forman nuestro cuerpo, se construye a partir de nutrientes. La visualización de todo lo que captamos ocurre por la interacción de nutrientes que circulan por la sangre y que permiten activar estímulos nerviosos.
Son varios nutrientes los que participan. La vitamina A o provitamina A que es de origen vegetal (zanahoria, tomate, zapallo, etc.) y que forman un gran grupo llamado carotenoides y la vitamina A preformada de origen animal presente en lácteos, quesos, vísceras, huevo, entre otros.
El otro grupo de nutrientes son los omega 3, pero específicamente el DHA y el EPA que son fundamentales para la reacción en cadena que permite la visión.
Si quieres cuidar la estructura del ojo y la vista incluir alimentos fuente de estos nutrientes es fundamental. Se aconseja consumir alimentos fuente de vitamina A a diario y fuentes de omega 3 tres veces por semana.