La avena en bebida o en preparación espesa como parte del desayuno, lonche o cena es cada vez más popular. La avena es un cereal con muy buenos atributos nutricionales. Por ejemplo: cuando se consume en hojuelas tenemos un cereal integral que concentra buen aporte de fibra tanto soluble, que favorece la reducción de colesterol, como insoluble que favorece la evacuación, además de vitaminas del complejo B.
Comer avena diariamente no es malo, pero tampoco es lo óptimo en la nutrición humana debido a que en la variedad de cereales tenemos atributos especiales. Se aconseja intercambiar, por ejemplo, con tubérculos porque es parte de la estrategia para lograr un balance nutricional.
Intercambiar avena con quinua o con harina de siete semillas es una alternativa para el desayuno. Estas pueden completarse con fruta, condimentos como canela y clavo y si desea sumar leche o bebida vegetal. Por otro lado, si tenemos avena en el desayuno u otro cereal, dependerá de nuestro peso y de la actividad física si incluimos pan.