La leche es buena para aportar nutrientes de calidad como sus proteínas que después del huevo, son las más completas. Sus proteínas se componen en un 80 % de caseína, la que suele causar alergias en algunas personas. Son de digestión más lenta lo que favorece la sensación de saciedad mientras que el 20 % son del suero, de fácil absorción y muy buscadas por deportistas a través del suplemento. Este mismo suero lo observamos en la parte superior del yogur natural.
Por otro lado, este alimento es una de las pocas fuentes de vitamina D. Esta ayuda al cuerpo a absorber el calcio y es constituyente del hueso. Es muy importante mantener sus niveles para prevenir procesos infecciosos respiratorios como la neumonía.
La leche es fuente de calcio y la que mejor se absorbe entre todos los alimentos ricos en este nutriente. Es por ello que se recomienda su consumo ya que necesitamos cubrir, según la edad, entre 800 a 1200 mg cada día. Cada vaso de leche aporta 250 mg de calcio por lo que debemos buscar otras fuentes adicionales.