El pescado, sobre todo graso, es uno de los alimentos que más recomendamos en niños debido a que concentra omega 3, un nutriente necesario para el desarrollo del sistema nervioso y que solo se obtiene de la dieta.
Los omega 3 el pescado graso, al igual que el de las algas marinas (excepto las cultivadas en agua dulce), contienen EPA y DHA, ácidos grasos poliinsaturados esenciales que no se encuentran en otro alimento.
A muchos no les agrada el pescado por su sabor, olor o las espinas, sin embargo, algunas técnicas de preparación pueden mejorar su aceptación. Por ejemplo, mantenerlo macerado con limón y luego ponerlo a cocción, añadir hierbas como perejil o romero, ajo y, por último, hornearlo.
Otra manera de hacer este alimento más apetecible es mantenerlo sumergido en leche, después llevarlo a cocción y, finalmente, incluirlo en preparaciones como guisos donde el sabor de los aderezos. Puede prepararlo en recetas como seco de pescado, escabeche de pescado o estofado de pescado.
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