Me habla en lenguaje inclusivo

Por: Magaly Moro

magalymoro@grupoepensa.pe

Antonio (26 años, Pueblo Libre). Doctora, sé que con esto van a acusarme de ridículo e intolerante, pero sé que soy muy riguroso respecto al uso del lenguaje. Estudié un par de años Lingüística y si bien no la terminé por falta de recursos, me obsesiono por el correcto uso de las palabras, la gramática y de los signos de puntuación. Si bien no a todas las personas les importa esto, a mí me ha traído problemas con mis relaciones amorosas. Siempre que he conocido a una chica y me daba cuenta con el pasar de los días que, por ejemplo, no sabía diferenciar el haz, del has, tengo la mala costumbre de corregir. Por este motivo muchas chicas se han molestado conmigo.

Cuando pensé que esta obsesión sería una maldición conocí a Tatiana. Ella es profesora de Literatura y Comunicación en un colegio de primaria. Es una mujer muy agradable con la que siento que puedo hablar de cualquier tema. Desde que mi amiga me la presentó, hemos estado saliendo y quiero seguir conociéndola; sin embargo, hace unos días me preguntó qué pensaba del lenguaje inclusivo. No estaba muy enterado del tema, pero me explicó que en otros países, grupos sociales buscan incluir palabras neutras, o sea, poder decir “todos, todas y todes”, siendo esta última palabra sin género para aquellas personas que no se identifican como hombres o mujeres. Cuando me dijo esto me pareció un disparate. Creo que reaccioné mal y ella lo tomó lo peor. Me dijo que el lenguaje debería tener la libertad de incluir a todas las personas. Doctora, me agrada Tatiana, pero que me haya dicho esto me desanima. ¿Qué hago?

OJO CONSEJO:

Todo depende de ti. Si crees que es algo que puedes manejar, entonces intenta hacer las paces. De lo contrario, mejor da un paso al costado.

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